El vicepresidente de la Cámara Binacional de Comercio Ecuador-México, Roberto Aspiazu, explica que para llegar a un acuerdo comercial con México hay dos opciones: hacerlo de forma directa entre gobiernos o hacerlo dentro del protocolo comercial de la Alianza del Pacífico.
A su criterio, el primer caso es más conveniente para Ecuador por la flexibilidad en la liberalización del comercio. Cabe notar que la Alianza establece como requisito para integrar ese bloque regional económico llegar a un acuerdo comercial con México y con el resto de sus países miembros.
Según Juan Carlos González, agregado Comercial, Económico, Turístico, Prensa, Cooperación y Cultura de la embajada de México en Ecuador, hay apertura para la firma de un acuerdo entre ambas naciones.
Aspiazu señala que las relaciones comerciales entre estos países no han mejorado desde la vigencia del Acuerdo de Alcance Parcial N° 29 que data de 1993, dado que libera pocas subpartidas arancelarias: de Ecuador alrededor de 300 y de México cerca de 200. Pero solo en Ecuador las subpartidas actuales son de más de 10.000. Explica, además, que “Hubo intentos de profundizar este acuerdo, pero las políticas de restricción comercial del gobierno anterior lo impidieron”.
Según el Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, anualmente se exporta a México aproximadamente $ 143 millones y se importa alrededor de $ 750 millones. Además, México es uno de los países que más invierte en Ecuador, entre 2008 y 2017 las inversiones fueron de cerca de $ 1.500 millones, lo que representa el 21% de la inversión total que recibió el país en ese período.
González asegura que México invirtió en Ecuador un total de $ 16.000 millones en estos años de relaciones comerciales y explica que “Hay ánimo del empresariado mexicano de seguir invirtiendo en Ecuador, hay confianza”.
Representantes del Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca explican que hay potencial para varios productos ecuatorianos, como los agrícolas, agroindustriales, de pesca y manufacturas. Destacan aquellos como camarón, tilapias, flores, procesados de la pesca, textiles y confecciones, lácteos, chocolates, alimentos procesados, productos químicos, cosméticos, entre otros.
Fuente: El Telégrafo
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